En la actualidad los e-commerce son una excelente manera de emprender no solamente por la rentabilidad que pueden tener, sino por el potencial que tienen para crecer tanto a mediano como a largo plazo si hacemos las cosas correctamente. Por eso muchas personas eligen este tipo de negocio por encima de los tradicionales, para los cuales se necesitan mayores cantidades de inversión al iniciar.
Pero si tú ya tienes tu propio negocio tradicional, ya tienes un buen camino andado, lo que es una excelente base para llevar dicho negocio al plano online. Esto no quiere decir que debas prescindir del primero, al contrario, la versión online podrá ser impulsar todavía más tu tienda tradicional. Si esta idea no te convence porque al negocio que ya tienes no le está yendo tan bien como te agradaría, aprende cómo atraer clientes hacia él.
Asimismo, es necesario que pierdas el miedo y te atrevas a arriesgarte porque expandir tu negocio hacia el Internet también puede ser esa pieza que faltaba para que este despegue. Las tiendas online y las tradicionales no están peleadas, de hecho, trabajan muy bien juntas. Solo es necesario esforzarse inteligentemente para lograr la sinergia deseada.
Entre los beneficios que obtendrás cuando tomas esta decisión destacan los siguientes:
- Amplias tu radio de acción, ya no dependes de un horario o específico para vender, sino que con el autoservicio que ofrecen las tiendas online podrás venderles a personas en cualquier momento donde ellos lo desean. Lo mismo ocurre con la limitación geográfica, esta se desvanece -dependiendo del producto/servicio que ofrezcas.
- Llegas a un mayor número de personas porque no dependes solamente de aquellos que pasan delante de tu tienda y se atreven a entrar, sino que cuentas con muchas más herramientas para captar clientes de otros lugares donde quizá tú ni habías volteado a mirar.
- La inversión extra es mucho menor en comparación con las ganancias que puedes obtener.
- Les ofreces más opciones de compra a tus clientes.
- Llegas a un nuevo tipo de público, a los que prefieres comprar por Internet que de manera convencional.
Estos entre muchos otros beneficios, pero también debemos decir que no es una tarea sencilla. Hay varios pasos que debes seguir y aspectos a los que les debes prestar la máxima atención para que este nuevo camino que emprendas pueda resultar tan favorable -y rentable- como lo habías anticipado. Esos pasos son:
1.- Elegir una plataforma: este paso es muy importante porque hay muchas en el mercado y no todas se adaptan a tus necesidades o a las del target al que apuntas. Depende de lo que quieras comercializar debes elegir la plataforma donde exponer tus productos, no te vayas por la primera que veas o la más económica. Hay varios elementos que debes tomar en cuenta:
1.1 Facilidad de uso (debe ser intuitiva)
1.2 Tener buen diseño (capacidad de personalización)
1.3 Ser segura
1.4 Mantenerse dentro de tu presupuesto.
Como hay tantas opciones lo mejor es que revises las políticas y el funcionamiento de unas cuantas, para poder quedarte con las 3 que cumplan tus requerimientos, compararlas entre sí y después elegir a la ganadora.
2.- Armar un equipo de trabajo: para tener una tienda online necesitas un equipo que no necesariamente debe estar contigo todo el tiempo o ser empleados permanentes, también puedes trabajar con freelancers. Esta no es una decisión que puede cambiar más adelante así que no te aflijas. El equipo básico que necesitarás es:
- Fotógrafo
- Encargados de las RRSS y estrategias de promoción del e-commerce
- Equipo de administración, operaciones y logística
Este equipo podrá ser tan grande como tú lo decidas, pero lo que siempre ocurre es que empiece siendo formado por pocas personas y a medida que la demanda aumenta, también los empleados. Pero para comenzar, puedes apoyarte además en el equipo que trabaja en tu tienda física (siempre y cuando sus obligaciones se lo permitan)
3.- Software: necesitas elegir y comprar las licencias de los softwares que utilizarás. Esto muchas personas lo pasan por alto por descuido o porque creen que no es importante, pero más adelante cuando la tienda comienza a funcionar y el caos se apodera de la misma, es que se dan cuenta de la necesidad de un software de control de inventario, de administración, de seguridad, entre muchas otras cosas.
Lo bueno de tener una tienda física primero es que ya tienes a tus proveedores de confianza, aunque es necesario que converses con ellos y también tengas una opción B y C, en caso de que tu primera alternativa no pueda cumplir con la nueva demanda que tendrá.
Asimismo, debes tener presente que necesitarás diversas estrategias para atraer personas a tu tienda online ya que en ese campo también hay muchísima competencia. Si no conoces nada al respecto, aprende estas estrategias para obtener más tráfico web hacia tu e-commerce y de esta manera tener mayores oportunidades de ventas.
Descripción del autor: Edith Gómez es editora en Gananci, apasionada del marketing digital, especializada en comunicación online. Se niega a irse a la cama cada noche sin haber aprendido algo nuevo. Le inquietan las ideas de negocio y, más aún, aportar una mirada creativa al pequeño mundo en el que vivimos.
Twitter: @edigomben
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